LAS VISITAS DOMICILIARIAS COMO HERRAMIENTA EFECTIVA DE SELECCIÓN

El Proceso de Visita Domiciliaria constituye una de las etapas de evaluación dentro del proceso de elección de personal para la vinculación laboral; normalmente se aplica en los momentos finales del proceso, después de haber realizado otros filtros a los candidatos.

Este proceso deberá estar a cargo de profesionales  de las ciencias humanas, con las competencias requeridas para la valoración, análisis e interpretación de la información que se recopila. 

 

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LOS PRESUPUESTOS EN LA GESTION DEL TALENTO HUMANO

 

En todos los ámbitos la tarea de elaborar un presupuesto que permita proyectar las necesidades y disponibilidad de recursos económicos para la realización de determinadas actividades, es una labor de gran importancia y responsabilidad, una labor muy necesaria para poder cumplir con los objetivos propuestos, en el corto, mediano y largo plazo.

En la Gestión del Talento Humano tenemos el gran reto de lograr transmitir a los Directivos, la manera en la cual los buenos resultados de este proceso contribuyen a minimizar perdidas y a incrementar rentabilidad; es el ejercicio de alinear los objetivos del departamento con las metas productivas y comerciales de la empresa.

 

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PROCESOS DE INDUCCION EN LA GESTION DEL TALENTO HUMANO

 

¿Recuerdas tu primer día de trabajo en las experiencias laborales que has tenido?  ¿Cuáles eran tus emociones? ¿Cuáles eran tus principales preguntas o inquietudes?

 

El proceso de inducción al nuevo personal, determina una pauta importante en el primer impacto que se logre generar en el empleado que ingresa, es la oportunidad de fidelizarlo con nuestra empresa a través del contenido y dinámica del ejercicio de inducción por parte de quienes lo llevan a cabo, con directas repercusiones en el posterior desempeño e integración del trabajador.


 

Aunque ya en etapas previas a la vinculación del trabajador, se ha brindado algún tipo de información como el quehacer de la compañía y sus productos o servicios,  las condiciones laborales, salariales y/o contractuales ofrecidas, así como lineamientos básicos de las funciones del cargo; una vez ingresa se complementa toda la información a través de la Inducción.

 

Con el ánimo de llevar a cabo un proceso organizado, podemos considerar al menos tres etapas en el desarrollo del proceso de inducción: Planeación, Ejecución y Evaluación.

 

En la Planeación del Proceso de Inducción, determinara el contenido, metodología y responsables de la actividad, así como los tiempos o duración del proceso. Algunos elementos básicos que todo Proceso de inducción deberá contener, incluyen: La Misión y Visión de la Empresa, sus Valores Organizacionales, Políticas de la compañía (en los diferentes aspectos que incluyen las políticas de gestión humana, administrativas, seguridad y salud en el trabajo, etc.), Historia, Productos y Servicios, Organigrama de la compañía, aspectos del Reglamento de Trabajo, clarificación de los canales de comunicación, procedimientos establecidos; tanto a nivel general como aquellos propios al cargo o proceso al que se vincula. Así mismo determinara el proceso subsiguiente de entrenamiento propio a las funciones del cargo.

 


La Ejecución del proceso de Inducción dará cumplimiento a la metodología y contenido que se ha determinado en la Planeación, permitiendo su desarrollo en los tiempos oportunos y obteniendo las evidencias requeridas de su realización. La cabal ejecución del proceso es fundamental para brindar todas las herramientas que un nuevo trabajador necesita como base para una adecuada integración, tanto a nivel personal como laboral en la organización.  En esta etapa deberá también considerarse el dar a conocer al resto del equipo (o círculo de mayor influencia, según el tamaño de la organización) la novedad del nuevo ingreso.  

 

Las falencias de un Proceso de inducción que resulte deficiente, o que ha omitido pasos, tiempos, información y/o la importancia de clarificar dudas o inquietudes, podrá traer consecuencias en fallas en el posterior desempeño, reprocesos por errores por desconocimiento o desinformación, lo cual a su vez podría causar repercusión tanto en la productivas o alcance de meta como en la convivencia en los equipos de trabajo.

 


La Evaluación del Proceso de inducción, tiene relación con estrategias de medición que permitan identificar el grado de apropiación e interiorización de los puntos clave de información que se espera que el trabajador haya adquirido. Otro momento que aporta una evaluación posterior al proceso de inducción, podría ser a través de la Evaluación del periodo de prueba, que se realiza un tiempo después del ingreso del trabajador; esta última permite identificar puntos que puedan requerir espacios de Re-Inducción, para complementar, corregir o aclaras aspectos en pro de la mejora del desempeño del trabajador.

 

Las estrategias metodológicas o de ayudas o material que complemente el proceso, estarán a discreción de la compañía, lo fundamental, es llevar a cabo un proceso completo, oportuno y calidad, que favorezca la integración, pertenencia y buen desempeño del personal a la organización.

 

Psicología Integral Consultores, ofrece para su organización, la Asesoría profesional en sus Procesos de gestión del talento humano.

 

MANEJO EFECTIVO DE REUNIONES DE TRABAJO

Las reuniones de trabajo han de constituir una herramienta de trabajo que favorezca la gestión de los equipos de trabajo en la organización, son espacios que han de ser planeados, estructurados, organizados y que arrojen una evidencia que permita obtener indicadores para el seguimiento de sus objetivos y resultados.

La eficacia de las reuniones cuando están bien organizadas y dirigidas exige que se les preste la atención debida, algunas recomendaciones generales a tener en cuenta, son:

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PROGRAMA TU MENTE Y ALCANZA TUS METAS

Resulta muy frecuente observar como algunas personas dedican gran cantidad de tiempo y emociones en la búsqueda del éxito y de la excelencia de forma dependiente de las circunstancias externas, ven su “suerte” sometida a factores ajenos al propio control o según las actitudes de otras personas, generando emociones como la frustración, impotencia o enojo. Lo anterior nos dejaría en una posición de pasividad ante nuestro futuro.

 

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